Un profesor se despide

Plataforma editorial inicia una colección titulada “Dentro del aula” con el objetivo de compartir con un público interesado en la docencia algunas experiencias cuya difusión merece la pena aunque no formen parte inicialmente del paradigma de la actual innovación docente más vinculada a nuevos métodos y nuevos recursos sobre todo de tipo tecnológico. Ricardo Fernández relata en «Un profesor se despide» la historia de un maestro de literatura de bachillerato en un Instituto que un año antes de su jubilación decide escribir un diario de sus clases para legárselo al que será sus sustituto al año siguiente. En él incluirá notas sobre la percepción que tienen los alumnos sobre la materia y sus intentos por acercarles una realidad que a priori parece estar muy lejos de sus intereses. La preocupación y creatividad del profesor hará que a través de ejemplos actuales y recursos muy básicos como pueden ser textos escritos, la reproducción de una obra de teatro en la televisión o la presencia física de algún autor, los alumnos entiendan y se interesen un poco más por las diferentes etapas de la historia de la literatura española. Cuando el joven profesor sustituto comienza a leer el diario lo hace con desgana, pensando que no es posible que alguien de la antigua escuela que no usa el ordenador para enseñar pueda realmente aportarle algo. Pero conforme avanza en la lectura, capítulo a capítulo comprueba repasando las notas cotidianas del viejo profesor el resultado de tan interesante experimento. El temario abarca las etapas habituales de cualquier programa de bachillerato: desde el mester de juglaría hasta el surrealismo o las vanguardias pasando por el Renacimiento, el Romanticismo, etc…; y personajes esenciales como Garcilaso, Cervantes, Lope de Vega, Bécquer, Antonio Machado, Blas de Otero…
Los amantes de la buena docencia disfrutarán con la lectura de estas páginas y en muchos casos el libro seguramente despertará en ellos el recuerdo de antiguos maestros de escuela cuya vocación docente no necesitaba de títulos ni galardones de innovación que la certificaran. Pero lo mejor de todo es que a pesar de lo que pueda parecer esta obra no es un alegato contra las nuevas tecnologías utilizadas en el aula pero sí una defensa de la figura del profesor como persona que convive con generaciones de jóvenes que no cambian de edad cada año que pasa. Ese rostro familiar que es capaz de corregir, sonreír, comentar un acierto, todo al mismo tiempo, tratando en definitiva de acompañar al alumno en ese viaje de varios años que transcurre en el colegio y que implica algo más que soltar la lección desde la tarima. Una valiosa aportación a su preparación para la vida que les espera más allá de las aulas. La escritora Elvira Lindo ruega al profesor protagonista en el prólogo del libro que por favor no se despida.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa.

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