Santo Tomás de Aquino

De pocos teólogos, filósofos y santos se habrán escrito más libros que de “santo Tomás de Aquino”. Océanos de tinta, toneladas de glosas, comentarios, tesis, notas a pie… Y, sin embargo, G. K. Chesterton, en poco más de doscientas páginas, nos entrega el mejor retrato jamás escrito de este maravilloso personaje, tan comentado y… tan poco conocido.
L.P. (Italia, 2017).
Se trata de un pequeño libro en el que Chesterton describe con su peculiar estilo vivo, alegre e irónico, al gran santo del medioevo, “santo Tomás de Aquino”. Como menciona el propio autor en su nota preliminar, pretende ‘presentar un bosquejo popular de una gran personalidad histórica’. En este sentido, en efecto, no se trata de una biografía exhaustiva, ni de un manual sobre su pensamiento teológico o filosófico, aunque también aborda estos temas.
El libro, en palabras de su autor, tiene como objeto conseguir ‘que quienes apenas han oído algo sobre “santo Tomás de Aquino” lean sobre él libros mejores. Aun así, precisamente por tratarse de un bosquejo, su brevedad le obliga a ser simple, a recurrir a anécdotas de la vida del personaje que dan nuevas perspectivas para presentar a tan importante santo. Es interesante la comparación que el autor hace, a lo largo del escrito, entre san Francisco y santo Tomás, dos santos del mismo tiempo, con espiritualidades distintas, pero con un solo fin: llevar la luz de Cristo al mundo cristiano, muy unidos al Papa. No en vano, refiriéndose a ambos santos, dice Chesterton: ‘No traían algo nuevo al cristianismo en el sentido de introducir en él algo pagano o herético; por el contrario, traían el cristianismo a la cristiandad’.
Este libro da las líneas maestras para profundizar en la vida y pensamiento del Doctor Angélico y para poder darlo a conocer.
G.C. (Panamá, 2016).

1 Comentario

  1. Biografía un tanto fuera de lo común, como fuera de lo común es su autor, en la que Chesterton narra, más que que la vida del Aquinate, su mente, su modo de pensar y razonar. Lectura densa y cercana a lo paradójico, tal y como es el estilo del autor.

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