El cliente

Dos hermanos se esconden en un bosque para fumar, y a los pocos minutos aparece un abogado que va a suicidarse dentro de su propio coche. El mayor de los niños, de 11 años, trata de impedirlo, pero el abogado se da cuenta y, antes de morir, le explica que le ha llevado a esa decisión desesperada la defensa de un asesino a sueldo de la mafia. El niño, desconcertado por los secretos que ha oído, y asustado por sus propias mentiras y por el shock traumático en que ha caído su hermano, acude a una abogada intrépida que se mueve con destreza en el mundo de la delincuencia.

La novela de John Grisham, bien estructurada, relata con estilo directo una trama que se desarrolla entre bastidores del mundo judicial, mafiosos y gentes de buena fe desprotegidas ante las miserables circunstancias de su entorno. Armoniza adecuadamente el relato con detalles que dan fuerza a la trama y diálogos que reflejan el lado amable de unos personajes que, sin estar trabajados a fondo en el aspecto psicológico, quedan bien caracterizados. Algunas situaciones son tópicas y otras inverosímiles, pero el argumento mantiene el interés hasta el final. En el ambiente permisivo y materialista que se refleja en la novela están bien delimitadas las conductas honradas, que son muchas, y las corruptas o ambiciosas. Los actos de violencia, asesinatos, trasgresiones de la ley, divorcios, etc., quedan explicados en su contexto.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa.

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