Amagí

El joven Yuseph Wahed, desde que es capaz de recordar, viene teniendo un sueño recurrente sobre baúles y del que acaba despertando de forma angustiosa con una palabra en los labios: “¡Amagi!”. Deseoso de conocer su significado, cuando cumple veinte años y tras fallecer su gran amigo Adnan, decide salir al mundo huyendo de la costumbre, la más letal de las enfermedades, e ir en busca de la libertad. Sin decir nada a su padre con el que vive en Casablanca, emprenderá un largo viaje por el norte de África donde conocerá el amor, la venganza, el odio y la ambición, pero también la verdad de las cosas, las enseñanzas que le guiarán en su vida y la sabiduría eterna del mundo.

Demasiado extensa para incluir esta novela en el género cuento, el escritor orientalista Sagar Prakash Khatnani, utiliza una forma de narración muy similar al recoger algunos de tradición hinduista, budista, del judaísmo, etc., intercalados en su relato. Varios de ellos, bien conocidos, restan originalidad dando la sensación de déjà vu. Sin enmarcar la historia en un momento determinado, todo hace suponer que se desarrolla en el siglo XIX. Los tiempos, por otra parte, se exponen con bastante incoherencia y en alguna ocasión de forma errónea. Utilizando la fantasía, la magia, el misterio y entornos exóticos típicos de la literatura oriental, la novela pretende ser moralizante a través de los fracasos y los aciertos de su protagonista. El poder del hombre sobre su destino está dentro de sí mismo y del dominio de su mente llegando a considerar esta fuerza superior a cualquier Dios.

Novela sencilla, muy simple en su estructura, puede evocar al lector adulto alguna de las imágenes de los cuentos de su infancia.

© Reseñas bibliográficas Fundación Troa.

 

Deja un comentario